courier

Estoy esperando con cierta impaciencia la tableta que va a sacar Apple al mercado y el futuro ataque/contrataque de las Android. Mientras tanto, os pongo este vídeo del producto en el que está trabajando Microsoft y que me ha sorprendido bastante. ¿Qué os parece?

¿a qué saben los libros?

firminFirmin es una rata canija que ha nacido en el sótano de una librería. Tiene doce hermanos de parto y su madre doce pezones para alimentarlos, así que la mayoría de las veces Firmin se queda sin comer. Para matar el gusanillo comienza a dar mordisquitos a los libros y al final termina leyéndolos. Ya sea por la dieta o por su atenta observación del mundo, deja detrás de sí frases rotundas:

«Amigo mío, dado el abismo que separa todas tus experiencias de todas las mías, lo más cerca que te puedo situar de ese sabor tan único es decirte que los libros, así, por término medio, saben a lo mismo que huele el café»

«Tendrían que enterrar los libros con sus propietarios, como hacían los egipcios, para que la gente no pudiera poner sus manazas en ellos, lgo, para que los muertos tuvieran algo que leer en su largo recorrido de eternidad»

«Malo el amor no correspondido, pero lo que verdaderamente puede hundirlo a uno es el amor no correspondible»

«En cierta ocasión, un hombre con quien estaba de charleta en un bar me preguntó a qué me dedicaba. Yo le contesté: -A infestar.– »

FirminSam Savage

los políticos según Dickens

Aquí tenemos, por ejemplo, a Lord Boodle, de considerable reputación en su partido, que ha sabido lo que es ejercer de ministro, y que dice a Sir Leicester Dedlock con gran solemnidad, después de la cena, que realmente no sabe adónde les va a llevar la presente época. Un debate ya no es lo que solía ser; la Camara ya no es lo que solía ser; incluso un gabinete de ministros es muy diferente a lo que era antes. Percibe con asombro que, suponiendo que cayera el gobierno actual, la elección por parte de la Corona para formar un nuevo gobierno se limitaría a Lord Coodle y a Sir Thomas Doodle, presuponiendo que sea imposible para el Duque de Foodle actuar con Goodle, que probablemente sería el caso como consecuencia de la brecha abierta por el esándalo con Hoodle. Entonces, si se diera el Ministerio de Asuntos Exteriores a Moodle, ¿qué se hace con Noodle? No se le puede poner a cargo de los Bosques, eso no es suficiente para Quoddle. ¿Entonces qué? ¡El país naufraga, se hunde, se viene abajo (como es evidente para el patriotismo de Sir Leicester Dedlock), porque no se puede encontrar un puesto para Noodle!

Por otra parte, el muy honorable William Buffy, miembro del parlamento, demuestra por encima de la mesa a otro, que el naufragio del país -sobre el que no cabe ninguna duda, pues tan sólo se discute la manera en que se va a producir- es atribuible a Cuffy. Si hubieras tratado a Cuffy como se debería haber hecho la primera vez que entró en el Parlamento, y si hubieras impedido que se pasara al partido de Duffy, podrías haber conseguido que se aliara con Fuffy, habrías conseguido el importante apoyo de un inteligente retórico como Guffy, en las elecciones habrías conseguido el apoyo de la riqueza de Huffy, habrías conseguido a Juffy, Kuffy y Luffy para los tres condados, y habrías fortalecido la Administración con los profundos conocimientos administrativos y económicos de Muffy. ¡Y todo esto en vez de depender ahora, como dependes, del mero capricho de Puffy!

Sobre este punto y otras cuestiones menores son de opiniones diferentes, pero resulta perfectamente claro al brillante y distinguido círculo a su alrededor que en realidad sólo se trata de Boodle y su séquito, y de Buffy y su séquito. Por supuesto, hay un pueblo, de eso no hay duda, un buen número de superfluos a los que hay que dirigirse ocasionalmente y que son los que han de corear los eslóganes, como en el escenario teatral; pero Boodle y Buffy, sus seguidores y sus familias, sus herederos, ejecutores testamentarios, administradores y curadores son los protagonistas natos, los directivos y líderes, y nadie más puede aparecer en escena, nunca.

Charles Dickens – Casa Desolada

Como dice la famosa canción…la vida sigue igual.

rosemary lane

Rosemary lane: canción popular inglesa que narra cómo un marinero seduce a una sirvienta, la engaña con falsas promesas, la deja embarazada y por último la abandona. Entonces la muchacha se pregunta por el futuro de su criatura:

Now if it’s a boy, he’ll fight for the King,
And if it’s a girl she’ll wear a gold ring;
She’ll wear a gold ring and a dress all aflame
And remember my service in Rosemary Lane

Hace muy poco la escuché por primera vez versionada por un grupo norteamericano llamado Espers. La interpretación es increíble y comparte a la vez sonidos de vieja balada marinera con una sustancia atemporal y un poco hipnótica.

Os dejo, como hago últimamente, un enlace de la canción para Spotify y también un vídeo en Youtube. Que la disfrutéis.

marshmallow test

Este vídeo no tiene desperdicio. En él se realiza el Marshmallow test (explicado en detalle aquí) a una serie de niños. Al parecer y según los científicos, tener la capacidad de saber esperar para obtener una recompensa mayor es un rasgo muy relacionado con la inteligencia emocional. Quien no posee dicha capacidad es más propenso en el futuro de comportarse de una manera inestable e irritable.

Yo lo siento por los científicos, pero veo muy tranquila a la niña que se lo come. De hecho parece estar pensando en coruño aquello de «cuanto más me dices, más me maro tuya». O traducido al castellano «cuanto más me hablas, más me río de tí» 🙂

P.D: Lo que les explica la chica a los niños es que si esperan un tiempo sin comer la nube, les dará otra de regalo.

Oh, The Temptation from Steve V on Vimeo.